Andreas Müller, Director General Adjunto de Camexa, confirmó en entrevista con Exprés que las firmas alemanas frenarán inversiones en el país y que hay proyectos detenidos que se ubican en el Bajío y San Luis Potosí. Se trata de empresas proveedoras en los sectores automotriz y de fabricación de maquinaria.
El 76 por ciento de los empresarios asociados a la Cámara Mexicano- Alemana de Comercio e Industria (Camexa) considera que sus proyectos de inversión se reducirán en nuestro país, con relación a lo previsto antes de la crisis del Covid-19, de acuerdo con datos de una encuesta aplicada a inversionistas teutones afiliados a esta organización.
Las principales causas del estancamiento radican en la crisis económica derivada de la contingencia sanitaria, pero también tienen su origen en la falta de certidumbre jurídica provocada a raíz de ciertas acciones en materia de política económica y regulatoria por parte del actual gobierno federal.
“Vemos que en este momento que México acaba de celebrar el nuevo acuerdo comercial con Estados Unidos y Canadá, debería ser un gran momento que le diera seguridad jurídica a México, pues esto le permite seguir vinculado con uno de los mercados más grandes del mundo, además del Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea, que le abre puertas de relación con Europa, tendría que ser un tiempo ideal, a pesar de las condiciones complejas”.
Sin embargo, de acuerdo con la encuesta aplicada por esta cámara, el 36.5 por ciento de los empresarios alemanes en México anticipan para este año una reducción de ventas del 25 al 50 por ciento con respecto a lo proyectado antes de la crisis epidemiológica.
“La causa principal es que el sector automotriz está frenado en Estados Unidos, esto hace muy difícil el tema de la demanda”.
Para Andreas Müller, la principal preocupación no radica en las decisiones políticas en sí mismas, sino en la manera cómo se han tomado, “pues no se han desarrollado los caminos usuales para emitir regulaciones, como fue el caso de estas encuestas para cancelar el Aeropuerto en Ciudad de México o la suspensión de Constelation Brands en Mexicali, no se hicieron por las vías legales, ni están respaldados por una formalidad, eso es preocupante”.
Otro factor es la reticencia del actual Gobierno de México para fortalecer la infraestructura en materia de energía renovable, “esto resta competitividad, sobre todo en el sector automotriz, porque sí vemos, sobre todo, hacia los próximos cinco años, que el mercado se convertirá hacia la movilidad eléctrica, eso será muy importante para el consumidor.
Que no se apueste por ese tema es preocupante y resta competitividad en el mediano plazo”.
RECUPERACIÓN TOMARÁ TRES AÑOS
El Director General Adjunto de Camexa señaló que retomar las inversiones alemanas detenidas en México tardará de dos a tres años y dependerá de varios factores.
“Lo primero será la situación concreta del sector automotriz, en función de que puedan regresar al cien por ciento a sus actividades productivas, y esto a su vez dependerá del desarrollo de la enfermedad en México, en la medida que las regiones del país entren a semáforo verde, se irá retomando la actividad productiva, lo que permitirá desarrollar infraestructura y más inversiones”.
El otro factor radica en el arranque del mercado en Estados Unidos, pues esto significará un incremento de la producción. A partir de esto podría anticiparse una recuperación para las inversiones alemanas, la cual tardaría en consolidarse de dos a tres años para regresar a los niveles previos a la pandemia.
Andreas Müller afirmó que no cuentan con cifras concretas sobre el número de inversiones detenidas, el monto ni la cantidad de empleos que generarían. No obstante, según la encuesta de Camexa, la situación es delicada, pues el 77.7 por ciento de los empresarios alemanes en México señalaron que la principal afectación que han resentido en esta crisis es una menor demanda de sus productos, seguido de la cancelación de pedidos (58.8%).
SECTORES AFECTADOS
Las inversiones alemanas en México afectadas por esta crisis se ubican principalmente en el ramo automotriz, “sobre todo por la caída, tanto de la oferta como de la demanda, pues no se están comprando automóviles y hay mucha incertidumbre”.
“El otro sector fuerte de Alemania en México que se ha visto afectado es el de la proveeduría de maquinaria, pues en diversas regiones se ha parado, hablamos sobre todo de la industria de imprenta y empaque donde Alemania provee mucho equipo”.
De igual forma, la fabricación y venta de dispositivos médicos es también un ramo importante para las inversiones teutonas en México, cuya dinámica económica se ha visto golpeada.
Aunque no compartió cifras específicas, Andreas Müller confirmó que muchas de las inversiones detenidas se encuentran en el Bajío y San Luis Potosí, sobre todo en el tema de la proveeduría automotriz, “muchas reinversiones en fábricas y parques industriales se frenaron”.
Sin embargo, señaló que grandes proyectos como Continental Tire en Aguascalientes y Bosch en Celaya se mantienen en pie y van muy avanzadas.
RELACIÓN CON POTENCIAL
Finalmente, el ejecutivo de Camexa afirmó que pese al complejo panorama actual, la relación comercial entre México y Alemania es fuerte y data de muchos años, “va más allá de coyunturas políticas y de gobiernos”.
“A futuro hay muchísimo potencial, México cuenta con una posición geográfica muy benéfica, está a un lado de uno de los mercados más importantes de consumo en el mundo y tiene la posibilidad de producir a costos muy interesantes”, apuntó.