El CONSULADO DE URUGUAY EN NUEVO LEÓN REALIZA REUNIÓN EMPRESARIAL

El salón Panorámico del Club Industrial de Monterrey, N.L., fue el escenario de la reunión de autoridades y empresarios uruguayos con similares mexicanos, con la finalidad de promover el intercambio comercial y de inversión con América del Sur.

Entre los asistentes de hornor, destacaron el Señor Embajador de Uruguay en México, Licenciado Anibal Cabral Segalerba; el Licenciado Fidel Gracida Gorena, Cónsul Honorario de Uruguay en Monterrey, N.L.; el Dr. Antonio Carámbula Sagasti, el Secretario de Desarrollo Agropecuario del Estado de Nuevo León y Christian Gómez, Delegado de ANIERM Noreste, además de otros 80 participantes de ambas naciones.

De izquierda a derecha: Christian Gómez Delegado de ANIERM Noreste, el Señor Embajador de Uruguay en México, Licenciado Anibal Cabral Segalerba y el Lic. José Ernesto Ortuz Sánchez Director del Departamento Económico Comercial Embajada del Uruguay en México.

Uruguay es un país que cuenta con 176,215 kilómetros cuadrados y tiene una población aproximada de 3.5 millones de habitantes (una densidad de población de 20 habitantes por kilómetro cuadrado), lo que le permite tener el ingreso per capita más alto de América Latina y una gran oportunidad de producción de lanas, carne de bovino, pieles y derivados, arroz y cítricos principalmente.

La importación de productos industriales, petróleo y sus derivados y farmacéuticos, forman un atractivo mercado para quienes contemplen incursionar en ese mercado de consumidores con muy buena y segura capacidad de compra.

Muy interesante resultó la reunión, como interesante es este gran país con características naturales e históricas únicas en el continente americano, lo que lo vuelve muy atractivo para la inversión y el desarrollo individual y empresarial. Uruguay cuenta con una cultura muy homogénea propicia para el entendimiento y la cooperación necesarias en cualquier tipo de relación política y comercial. 

El Tratado de Libre Comercio entre México y Uruguay (único de este tipo que México ha celebrado con países del Mercosur) firmado en 2003 y vigente a partir de 2004, ha duplicado el intercambio comercial entre ambas naciones y abierto opciones de crecimiento en la inversión recíproca. La zona libre de Uruguay abre la posibilidad de que empresas puedan establecerse ahí y sus productos terminados sean considerados uruguayos, sin restricciones arancelarias y en absoluta ventaja en ese mercado, frente a similares de otras naciones.

Esperamos que reuniones de este tipo multipliquen el interés por la cooperación entre los países latinoamericanos que siempre estarán unidos por su historia y por sus propósitos de crecimiento y desarrollo compartidos.